“La verdadera libertad requiere atención, y ser consciente, y disciplina, y poder empatizar con otras personas.”

    —David Foster Wallace, Esto es agua (conferencia en Kenyon College, 2005; ed. Mondadori, 2010)

(27) 2016 – Death Minions (fanzine / autopublicación), Buenos Aires (Argentina) #1

Death Minions fue el primer proyecto que realizamos juntos, antes incluso de llamarnos Los Picoletos. En ese momento nos presentamos como Torre Cuadrada y los Picoletos, un nombre que tomamos de la película El Pico (1983) de Eloy de la Iglesia. Allí, el comandante Torre Cuadrada es el padre de Paco (interpretado por José Luis Manzano), en una historia atravesada por droga, marginalidad y violencia en Bilbao. Ese gesto fue casi premonitorio: años más tarde, Bilbao se convertiría en nuestra ciudad de residencia.

El fanzine, autopublicado en Buenos Aires, ya contenía muchos de los ejes que más tarde definirían nuestra obra: la cultura skate, la estética punk DIY, los restos de la infancia y una iconografía urbana hecha de basura, cicatrices y humor negro. El título Death Minions mezclaba la pulsión destructiva con la ternura naïf de los personajes de Mi villano favorito (2010), que nos fascinaban por lo absurdo y lo infantil.

En sus páginas aparecen yesos de huesos rotos —dicho sea de paso, esto fue también una premonición del accidente que sufriría Dante ese mismo año—, fotografías caseras tomadas con celular de objetos desechados en Buenos Aires, y un collage de logos: el tricornio de la Guardia Civil Española en llamas y una porción de pizza con nuestros nombres, reflejo de nuestra alimentación cotidiana y de la amistad que ya nos unía.

También aparece el libro Esto es agua (2010, editorial Mondadori) de David Foster Wallace, una referencia a la atención y la fragilidad de la vida diaria. Esa cita dialoga con la crudeza del fanzine: una mirada punk y a la vez existencial sobre cómo habitar el mundo desde lo precario, el accidente y la amistad como sostén.